Las cámaras de un autoclave consisten principalmente en la cámara de presión, que se divide en una cámara interior y una camisa exterior, y la tapa o puerta que da acceso a la cámara interior.
Cámara de presión:
- La cámara de presión es el componente central de un autoclave. Está diseñada para soportar las condiciones de alta presión y temperatura necesarias para la esterilización y otros procesos. La cámara se compone de dos partes principales:Cámara interior:
- Es el espacio donde se colocan los objetos a esterilizar. Suele estar fabricada con materiales resistentes, como acero o bronce de cañón, para soportar las altas presiones y temperaturas. El tamaño de la cámara interior puede variar significativamente, desde 10 litros hasta 1.000 litros o más, dependiendo del modelo específico y del uso previsto.Cubierta exterior:
Rodeando la cámara interior, la camisa exterior proporciona una integridad estructural adicional y sirve de contención para el vapor sobrecalentado que fluye entre las dos paredes. Esta camisa exterior suele estar hecha de hierro o acero y ayuda a mantener la temperatura y la presión dentro del sistema.Tapa o puerta:
- La cámara de presión está sellada por una tapa o puerta, que es crucial para mantener la presión y la temperatura dentro de la cámara durante el proceso de esterilización. El diseño de la tapa o puerta puede variar:
- Puertas con bisagras: Común en autoclaves más grandes, estas puertas se abren sobre una bisagra, permitiendo un acceso más fácil a la cámara grande. Normalmente se fijan con tornillos o abrazaderas para garantizar un cierre hermético.
Tapas removibles:
Los autoclaves más pequeños, similares a las ollas a presión, suelen tener tapas completamente desmontables. Éstas se sellan con abrazaderas y una arandela de amianto para garantizar un cierre hermético, evitando cualquier pérdida de presión o vapor durante el funcionamiento.
Estos componentes trabajan juntos para crear un entorno de temperatura y presión elevadas, esencial para la esterilización de equipos médicos, herramientas de laboratorio y otros materiales que requieren un alto grado de limpieza y desinfección. El diseño y la capacidad de las cámaras pueden variar significativamente en función de la escala y los requisitos específicos del autoclave, desde unidades a pequeña escala adecuadas para laboratorios universitarios hasta modelos a gran escala utilizados en hospitales y entornos industriales.