El aceite de pirólisis puede ser perjudicial debido a su naturaleza reactiva, su potencial de riesgo de incendio y explosión, la emisión de contaminantes y sus propiedades corrosivas.
Naturaleza reactiva e inestabilidad:
El aceite de pirólisis se compone de productos de descomposición intermedios y reactivos, lo que lo hace generalmente inestable con el tiempo. Esta inestabilidad provoca cambios en el aceite, como un aumento gradual de la viscosidad y una posible separación de fases. Calentar el aceite a temperaturas superiores a 100 °C puede provocar reacciones rápidas, dando lugar a un residuo sólido y a la liberación de compuestos orgánicos volátiles y agua. Esta característica hace que la manipulación y el almacenamiento del aceite de pirólisis sean complicados y potencialmente peligrosos.Peligros de incendio y explosión:
El proceso de pirólisis implica calentar materiales a altas temperaturas, lo que puede ser peligroso si no se gestiona adecuadamente. Los materiales inflamables que intervienen en la pirólisis pueden provocar incendios o explosiones si no se siguen estrictamente los protocolos de seguridad. Para minimizar estos riesgos es crucial aplicar un diseño adecuado de los equipos, sistemas de seguridad como equipos de extinción de incendios y a prueba de explosiones, y cumplir las directrices de seguridad.
Emisión de contaminantes:
Los procesos de pirólisis pueden generar emisiones de gases, compuestos orgánicos volátiles (COV) y partículas. Estas emisiones pueden afectar negativamente a la calidad del aire y plantear riesgos para el medio ambiente y la salud. Por ello, las plantas de pirólisis deben emplear sistemas eficaces de control de emisiones, como depuradores, filtros y equipos de vigilancia, para evitar la liberación de contaminantes a la atmósfera.
Propiedades corrosivas y riesgos para la salud: