Los beneficios de la limpieza con cenizas giran principalmente en torno a la mejora de las propiedades de los materiales y la reducción de defectos en diversos procesos de fabricación. El calcinado, a menudo asociado a la eliminación de materiales orgánicos de una muestra, puede relacionarse metafóricamente con procesos como el prensado isostático en caliente (HIP) y el tratamiento térmico al vacío, que eliminan la porosidad y mejoran la integridad de las piezas metálicas.
Mejora de las propiedades de los materiales:
El recocido, o procesos afines, mejora significativamente las propiedades mecánicas de los materiales. Por ejemplo, el tratamiento HIP mejora la resistencia a la fatiga, la ductilidad a la tracción y la tenacidad a la fractura. Esta mejora es crucial en aplicaciones en las que los materiales están sometidos a grandes esfuerzos o a cargas repetidas, como en la industria aeroespacial o del automóvil.Reducción de defectos:
Al eliminar los huecos internos y la porosidad, los procesos de tipo ceniza reducen la probabilidad de fallo del material. Esta reducción repercute directamente en la calidad y fiabilidad de las piezas fabricadas, lo que se traduce en un menor índice de rechazo de piezas fundidas y una reducción de los costes de inspección. Por ejemplo, el HIP puede eliminar prácticamente los huecos internos de las piezas fundidas, lo que no sólo mejora la integridad estructural, sino que también reduce la necesidad de realizar exhaustivas inspecciones de control de calidad.
Beneficios económicos:
La aplicación de cenizas o tratamientos similares puede conllevar ventajas económicas. Al mejorar las propiedades del material y reducir los defectos, los fabricantes pueden disminuir las tasas de desecho y mejorar el rendimiento. Esto no sólo reduce los costes de producción, sino que también puede suponer un ahorro en costes de inspección radiográfica y de otro tipo. Además, la posibilidad de sustituir componentes forjados por piezas fundidas que han sido sometidas a dichos tratamientos puede reducir aún más los costes y mejorar la eficacia.Mayor fiabilidad y vida útil:
Los materiales tratados mediante procesos similares a la ceniza presentan una mayor fiabilidad y una prolongación de la vida útil. Esto es especialmente beneficioso en aplicaciones críticas en las que el fallo no es una opción, como en dispositivos médicos o equipos de seguridad. La mayor fiabilidad también se traduce en menos requisitos de mantenimiento y menores costes operativos generales.