Los gránulos prensados se forman comprimiendo polvos sueltos en una forma sólida y cilíndrica utilizando una máquina prensadora y matrices. El proceso implica seleccionar las matrices adecuadas en función de las características del polvo, y puede facilitarse pulverizando el polvo o añadiendo un aglutinante si el material es difícil de granular. El equipo utilizado, como las granuladoras o las prensas de granulado, varía en escala y complejidad, desde las aplicaciones industriales a gran escala hasta el uso a pequeña escala en laboratorio.
Formación de pellets prensados:
Los pellets prensados se crean llenando un anillo o un vaso con polvo suelto y aplicando después presión con una máquina prensadora. La elección de las matrices, ya sean de disco plano o cilíndricas, depende de las características específicas de la muestra de polvo. Factores como el tamaño del grano y la facilidad de peletización influyen en la eficacia del proceso. Si el polvo es difícil de comprimir, se puede mejorar pulverizando el material a un tamaño de grano más fino o mezclándolo con un agente formador o aglutinante.Equipo utilizado:
El equipo utilizado para fabricar pellets prensados incluye molinos de pellets y prensas de pellets. Las granuladoras, diseñadas para transformar materiales en polvo en pellets más grandes y homogéneos, son de varios tipos, como las de matriz plana y las de matriz anular. Estas máquinas se utilizan en diferentes sectores, como la construcción, el reciclaje, la metalurgia y otros. También existen prensas de granulado de sobremesa más pequeñas para laboratorios, que ofrecen una solución más económica y eficiente en términos de espacio para producir granulados sin necesidad de una costosa maquinaria de fabricación de pastillas.
Características de los pellets producidos:
Los gránulos producidos suelen ser cilíndricos con extremos planos, y su grosor viene determinado por la cantidad de material comprimido y la fuerza aplicada durante el proceso de prensado. En el laboratorio, las prensas de pellets están diseñadas para proporcionar una ventaja mecánica, permitiendo la aplicación de una fuerza significativa para crear pellets firmes a partir de materiales en polvo, a menudo sin necesidad de aglutinantes adicionales.