La porcelana dental es un material cerámico utilizado en odontología para realizar restauraciones como coronas, puentes, incrustaciones y empastes. Se compone de aproximadamente un 60% de caolín puro y un 40% de otros aditivos como feldespato, cuarzo y óxidos para mejorar su color, dureza y durabilidad. La resistencia de la porcelana dental se debe principalmente a su composición y al proceso de cocción a alta temperatura al que se somete en un horno dental.
Composición y resistencia:
La porcelana dental está formulada para ser fuerte y duradera, principalmente debido a su alto contenido en caolín y a la inclusión de otros minerales. El caolín, un tipo de arcilla, forma una estructura cristalina estable y duradera cuando se calienta, lo que contribuye significativamente a la resistencia de la porcelana. La adición de cuarzo aumenta la dureza, mientras que el feldespato y diversos óxidos realzan el color y la durabilidad. Esta combinación de materiales garantiza que la porcelana dental pueda soportar las fuerzas de compresión que se experimentan en la cavidad bucal.Procesamiento y mejora de la resistencia:
La resistencia de la porcelana dental se mejora aún más mediante su procesamiento en un horno dental. Estos hornos están diseñados para calentar la porcelana hasta niveles óptimos de madurez, garantizando que las restauraciones mantengan características importantes como la textura de la superficie, la translucidez, el valor, el tono y el croma. El control preciso del horno sobre la temperatura y las velocidades de enfriamiento ayuda a conseguir la resistencia y las propiedades estéticas deseadas. El uso de una función de enfriamiento de revenido en estos hornos, que implica un enfriamiento lento, ayuda a mejorar los efectos de color y la calidad general de la porcelana, mejorando así su resistencia y durabilidad.
Sistemas metalocerámicos: