La técnica con excelente sensibilidad para el análisis elemental es la espectroscopia de fluorescencia de rayos X (XRF). Este método es muy sensible y versátil, capaz de analizar una amplia gama de elementos, desde el potasio (K19) hasta el uranio (U92), con concentraciones que oscilan entre 1 ppm y el 99,99%. El FRX funciona bombardeando la muestra con rayos X, lo que provoca la eyección de electrones internos. A continuación, el átomo se relaja emitiendo fotones de longitudes de onda características, que se utilizan para identificar el elemento.
Explicación de la espectroscopia XRF:
La espectroscopia XRF es una técnica analítica no destructiva que determina la composición elemental de los materiales. Funciona exponiendo la muestra a rayos X de alta energía, que interactúan con los electrones internos de los átomos de la muestra. Cuando estos electrones internos son expulsados, el átomo experimenta un proceso de relajación en el que los electrones externos llenan las vacantes, emitiendo fotones de rayos X en el proceso. Cada elemento emite fotones con longitudes de onda específicas, lo que permite identificar y cuantificar los elementos presentes.
- Ventajas de la espectroscopia XRF:Amplio rango elemental:
- El XRF puede analizar elementos desde el potasio hasta el uranio, lo que lo hace adecuado para un amplio espectro de aplicaciones.Alta sensibilidad:
- Con la capacidad de detectar concentraciones tan bajas como 1 ppm, el XRF ofrece una sensibilidad excelente para el análisis de oligoelementos.No destructivo:
- La técnica no altera la muestra, preservando su integridad para posteriores análisis en caso necesario.Análisis rápido:
- Los resultados se obtienen en segundos, lo que resulta beneficioso tanto para entornos de laboratorio como industriales en los que es crucial obtener información rápida.Versatilidad:
El XRF es aplicable en diversos entornos y puede utilizarse para la gestión de la calidad de aleaciones, revestimientos, líquidos y otros materiales.Consideraciones y limitaciones:
Aunque el XRF es muy sensible y versátil, requiere una preparación cuidadosa de la muestra para garantizar la consistencia, especialmente en lo que respecta a la granularidad de la muestra y la presión aplicada durante la formación de gránulos. Esto es particularmente importante cuando se analizan materiales del mismo origen mineral y proceso de producción, donde no es obligatoria una alta precisión.