La temperatura a la que debe funcionar un rotovap suele oscilar en torno a los 50 °C, especialmente cuando se utiliza junto con un vacío profundo. Este ajuste de temperatura es crucial para una evaporación eficaz sin dañar la muestra, especialmente cuando se trata de componentes delicados como péptidos o proteínas.
Explicación del ajuste de temperatura:
La elección de 50°C es estratégica porque equilibra la necesidad de calor suficiente para facilitar la evaporación con la necesidad de evitar el sobrecalentamiento de materiales sensibles. Bajo un vacío profundo, el punto de ebullición de los disolventes se reduce significativamente, lo que les permite evaporarse a temperaturas más bajas de lo que lo harían a presión atmosférica normal. Esto es especialmente importante cuando la muestra incluye moléculas biológicas delicadas que pueden desnaturalizarse o degradarse a temperaturas más altas.El papel del vacío:
- El vacío profundo es esencial para reducir el punto de ebullición de los disolventes, lo que a su vez permite trabajar a temperaturas más bajas. Las fuentes de vacío tradicionales, como las bombas peristálticas o los aspiradores, son insuficientes para este fin, ya que no pueden alcanzar las bajas presiones (en el rango de mTorr) necesarias para un funcionamiento eficaz del rotovap. Por lo tanto, se recomienda una bomba de vacío robusta capaz de alcanzar estas bajas presiones.Pasos operativos:
- Arranque de la bomba de vacío: En primer lugar, ponga en marcha la bomba de vacío y déjela funcionar durante unos minutos antes de inyectar la muestra. Esta configuración inicial del vacío garantiza que el sistema está listo para funcionar.
- Cebe el Rotovap: Una vez que el vacío sea estable y muestre una lectura baja, inyecte un pequeño volumen (20% del total) del líquido en la válvula del rotovap. El proceso de evaporación se inicia a medida que la temperatura del enfriador aumenta ligeramente.
Ajuste la inyección: Vigile la temperatura; una vez que se estabilice o empiece a bajar, abra lentamente la válvula de inyección para introducir más líquido en el matraz rotativo. El objetivo es igualar las tasas de entrada y salida para mantener un proceso estable.
Conclusión: