Los nanotubos de carbono (CNT) pueden producirse en masa, aunque lograr una calidad y homogeneidad constantes a gran escala sigue siendo un reto. El principal método para producir CNT a escala industrial es la deposición química en fase vapor (CVD), en particular la CVD mejorada por plasma (PECVD), que es la técnica preferida por su eficacia y escalabilidad.
Técnicas de producción:
El proceso CVD implica la descomposición de gases que contienen carbono a altas temperaturas, normalmente sobre un catalizador, para formar CNT. Este método permite controlar las propiedades de los CNT, como el diámetro, la longitud y la quiralidad, ajustando parámetros como la temperatura, la presión, los caudales de gas y la naturaleza del catalizador. La escalabilidad del CVD queda demostrada por su uso en numerosas aplicaciones industriales, como demuestra el importante tamaño del mercado de los CNT, que se valoró en 38 540 millones de dólares en 2022 y se prevé que alcance los 105 000 millones de dólares en 2030.Retos de la producción en masa:
A pesar de la escalabilidad del proceso CVD, persisten varios retos en la producción masiva de CNT. Entre ellos se encuentran conseguir una calidad uniforme del producto en grandes superficies, mantener la estabilidad y fiabilidad de los CNT y minimizar los costes de energía y material. La industria no sólo se centra en producir grandes cantidades, sino también en garantizar que los CNT sean homogéneos y de calidad constante, lo que resulta crucial para su uso eficaz en diversas aplicaciones.
Industrialización y expansión del mercado:
La industrialización de la producción de CNT implica optimizar los procesos para que sean eficientes desde el punto de vista energético y rentables, al tiempo que se abordan los problemas de cuello de botella en la transferencia y manipulación de los nanomateriales. El mercado en expansión de los CNT, impulsado por sus superiores propiedades mecánicas, eléctricas y térmicas, subraya la necesidad de mejorar continuamente las técnicas de producción para satisfacer la creciente demanda en sectores como la electrónica, el aeroespacial y la automoción.