El prensado isostático es un proceso de fabricación que aplica la misma presión desde todas las direcciones a un polvo compactado, normalmente dentro de un recipiente herméticamente cerrado, utilizando un medio fluido como gas o líquido. El objetivo de este proceso es lograr una densidad y uniformidad óptimas en la microestructura del material, lo que resulta crucial para mejorar sus propiedades mecánicas y su precisión dimensional.
Mecanismo del prensado isostático:
El proceso consiste en colocar el polvo metálico u otro material en una membrana flexible o un recipiente hermético. A continuación, este recipiente se sumerge en un medio presurizador, que puede ser un líquido o un gas. El medio ejerce una presión uniforme desde todas las direcciones, compactando el polvo y reduciendo su porosidad. Esta presión uniforme garantiza que la densidad de la pieza compactada sea constante en todo el proceso, lo que resulta especialmente importante en el caso de piezas con geometrías complejas o elevadas relaciones grosor-diámetro.Tipos de prensado isostático:
- Existen dos tipos principales de prensado isostático: el prensado isostático en frío (CIP) y el prensado isostático en caliente (HIP).
- Prensado isostático en frío (CIP): Este método utiliza condiciones de temperatura ambiente e implica la compactación de polvos encerrados en moldes de elastómero. El CIP es adecuado para tiradas de producción cortas y es conocido por su capacidad para producir piezas con gran precisión dimensional.
Prensado isostático en caliente (HIP): Esta variante implica el uso de temperaturas elevadas junto con la presión isostática. El HIP es especialmente eficaz para consolidar polvos y subsanar defectos en piezas fundidas, por lo que resulta ideal para aplicaciones que requieren una gran integridad y rendimiento del material.
Aplicaciones y ventajas:
El prensado isostático se utiliza ampliamente en diversos sectores, como la cerámica, los metales, los compuestos, los plásticos y los materiales de carbono. El proceso se ve favorecido por su capacidad para conformar formas complejas con tolerancias precisas, reduciendo la necesidad de costosas operaciones de mecanizado. Además, es especialmente beneficioso para materiales que requieren alta densidad y uniformidad, como los materiales refractarios y la cerámica avanzada.
Contexto histórico: