Los tres principales procesos de sinterización son la sinterización en estado sólido, la sinterización en fase líquida y la sinterización viscosa. Estos procesos se utilizan ampliamente en la industria e implican diferentes mecanismos para unir las partículas entre sí.
Sinterización en estado sólido:
Este proceso consiste en calentar un material en polvo a una temperatura justo por debajo de su punto de fusión. Las partículas se unen mediante difusión atómica en los límites de los granos, sin formación de fase líquida. Este método es eficaz para materiales que pueden soportar altas temperaturas sin fundirse, y da como resultado un material denso y resistente.Sinterización en fase líquida:
En este proceso, se añade una pequeña cantidad de un líquido disolvente a la mezcla de polvo. Este líquido facilita la unión de las partículas rellenando los huecos y reduciendo la porosidad. A continuación, el líquido se expulsa, normalmente mediante calentamiento, dejando tras de sí una estructura sólida e integrada. Este método es especialmente útil cuando los componentes tienen diferentes puntos de fusión, ya que el líquido puede ayudar a la densificación uniforme del material.
Sinterización viscosa: