Los nanotubos de carbono (CNT) pueden considerarse potencialmente ecológicos, pero esto depende de los métodos de producción y las materias primas utilizadas. Los métodos de producción tradicionales, como la deposición química de vapor (CVD), plantean problemas medioambientales, pero los nuevos métodos que utilizan materias primas ecológicas o residuales, como la pirólisis de metano y la electrólisis de dióxido de carbono, ofrecen alternativas más sostenibles. En comparación con otros aditivos de carbono conductores, como el negro de carbono y el grafeno, los CNT tienen en general un menor impacto ambiental, sobre todo en términos de emisiones de CO2 y liberación de nanopartículas en aplicaciones como la fabricación de neumáticos.
Métodos de producción y materias primas:
Los métodos tradicionales de producción de CNT, como la ablación por láser y la descarga por arco, están siendo sustituidos por el CVD, que es más viable comercialmente pero sigue teniendo implicaciones medioambientales. Sin embargo, el cambio hacia el uso de materias primas verdes o residuales en la producción de CNT es un paso importante hacia la sostenibilidad. Por ejemplo, métodos como la pirólisis de metano convierten el metano en hidrógeno y carbono sólido, secuestrando eficazmente las emisiones de carbono. Del mismo modo, la electrólisis de dióxido de carbono en sales fundidas para producir CNT es otro método ecológico, aunque sigue preocupando la calidad de los CNT producidos.Comparación con materiales alternativos:
A la hora de evaluar el impacto medioambiental de los CNT, es fundamental compararlos con otros aditivos de carbono conductores. El negro de carbón, utilizado habitualmente en diversas industrias, tiene unas emisiones de CO2 por kilogramo más elevadas y requiere una mayor carga en los materiales compuestos, lo que conlleva una mayor huella medioambiental. En cambio, los CNT han mostrado menores emisiones de nanopartículas en aplicaciones como la fabricación de neumáticos, como demuestra un estudio de Michelin de 2020. El grafeno, otro material avanzado, se enfrenta a retos en sus métodos de producción, que a menudo consumen mucha energía y requieren cantidades significativas de agua y productos químicos agresivos.
Mercado y perspectivas de futuro: