El calentamiento por inducción es un proceso sin contacto utilizado para unir, endurecer o ablandar metales u otros materiales conductores generando calor mediante inducción electromagnética y el efecto Joule. Este proceso implica el uso de una fuente de corriente alterna (CA) para suministrar corriente a una bobina de calentamiento por inducción, que a su vez genera un campo magnético alterno. Cuando se coloca un material conductor de la electricidad dentro de este campo magnético, se inducen corrientes de Foucault en el material. Estas corrientes de Foucault, que fluyen en contra de la resistividad del metal, generan calor por efecto Joule, lo que provoca un aumento de la temperatura del material.
Inducción electromagnética:
El principio de inducción electromagnética es fundamental en el proceso de calentamiento por inducción. Cuando un material conductor de la electricidad se expone a un campo magnético variable, como el producido por una bobina de inducción que transporta una corriente alterna, experimenta la inducción de corrientes eléctricas. Estas corrientes inducidas, denominadas corrientes de Foucault, circulan por el interior del material conductor. La magnitud de estas corrientes depende de la intensidad del campo magnético, de la conductividad eléctrica del material y de la frecuencia de la corriente alterna.Calentamiento Joule:
El segundo principio clave del calentamiento por inducción es el calentamiento Joule, también conocido como calentamiento resistivo. Cuando se inducen corrientes de Foucault en el material conductor, éstas encuentran resistencia debido a la resistividad inherente del material. A medida que estas corrientes fluyen, disipan energía en forma de calor, lo que eleva la temperatura del material. Esta transformación de energía eléctrica en energía térmica se rige por la primera ley de Joule, que establece que el calor generado por unidad de tiempo en un conductor es proporcional a la resistencia eléctrica del conductor y al cuadrado de la corriente.
Aplicación y control: