Los relojes PVD son muy duraderos gracias a las excepcionales propiedades de los revestimientos PVD. Estos revestimientos se forman mediante un proceso que garantiza una fuerte unión a nivel atómico con el material base, lo que evita que se desprendan o astillen. Los materiales utilizados en el PVD, como el nitruro de titanio, son extremadamente duros y resistentes al desgaste, lo que aumenta la robustez de los relojes.
Durabilidad de los revestimientos PVD:
Los revestimientos PVD son notablemente más duraderos que los métodos tradicionales de chapado, como la galvanoplastia. Esto se debe a que los procesos de PVD crean un revestimiento más grueso y resistente. El material del revestimiento, una vez depositado, forma una capa robusta y resistente al desgaste, lo que garantiza que el reloj conserve su aspecto original incluso tras un uso prolongado. Esto incluye la resistencia a la humedad, el sudor y el desgaste diario, que son retos habituales para los relojes.Resistencia a la corrosión y al deslustre:
Los revestimientos de PVD también son muy resistentes al deslustre y la corrosión. Esta característica es crucial para mantener el atractivo estético de los relojes con el paso del tiempo, ya que evita que los colores y acabados se decoloren. Por ejemplo, los revestimientos de PVD en oro o platino proporcionan un acabado brillante muy resistente a arañazos y rozaduras, problemas habituales con procesos de chapado menos resistentes.
Aplicación y rendimiento:
La durabilidad de los revestimientos PVD no sólo se limita a los relojes, sino que también es evidente en otras aplicaciones como manillas de puertas, accesorios de fontanería y equipos marinos. Estos revestimientos se eligen por su dureza, durabilidad y resistencia al desgaste superiores, que son fundamentales en entornos de uso intensivo y difíciles.Seguridad y ventajas adicionales: