El tratamiento térmico del metal para hacerlo más resistente implica una serie de procesos controlados de calentamiento y enfriamiento diseñados para alterar la microestructura del metal y mejorar sus propiedades mecánicas. El proceso suele incluir tres pasos principales: calentar el metal a una temperatura específica, mantenerlo a esa temperatura durante un tiempo predeterminado y, a continuación, enfriarlo según un método prescrito. Se utilizan distintos métodos de tratamiento térmico, como el recocido, el revenido y el carburizado, en función del resultado deseado y del tipo de metal.
Calentamiento a una temperatura determinada:
El primer paso en el tratamiento térmico es elevar la temperatura del metal a un nivel que permita cambiar su microestructura. Esta temperatura varía en función del tipo de metal y del proceso de tratamiento térmico específico que se utilice. Por ejemplo, en el recocido, el metal se calienta a una temperatura que permite que los átomos se muevan más libremente, lo que ayuda a reducir las tensiones internas y hace que el metal sea más blando y dúctil.Mantener la temperatura durante el tiempo adecuado:
Una vez que el metal alcanza la temperatura deseada, se mantiene a esa temperatura durante un tiempo determinado. Este tiempo permite que los cambios microestructurales se produzcan de manera uniforme en todo el metal. La duración puede oscilar entre unos segundos y varias horas, en función del tamaño de la pieza metálica y del tratamiento específico. Por ejemplo, en el endurecimiento por precipitación, el metal se mantiene a una temperatura elevada para permitir la formación de una segunda fase que aumenta la resistencia del metal.
Enfriamiento según métodos prescritos:
- El proceso de enfriamiento es crucial, ya que determina las propiedades finales del metal. El enfriamiento puede ser lento, como en el recocido, para permitir que el metal se ablande y alivie las tensiones internas, o rápido, como en el temple, para endurecer el metal fijando la microestructura de alta temperatura. Tras el temple, el revenido se utiliza a menudo para reducir la fragilidad que puede provocar el enfriamiento rápido recalentando el metal a una temperatura inferior.
- Diferentes métodos de tratamiento térmico:Recocido:
- Este proceso ablanda el metal y mejora su ductilidad calentándolo y enfriándolo lentamente. Es útil para facilitar el mecanizado o conformado del metal.Revenido:
Después de templar un metal, se utiliza el revenido para reducir su fragilidad recalentándolo y enfriándolo a continuación. Este proceso aumenta la tenacidad y ductilidad del metal.
Carburación: