Un horno de laboratorio es un dispositivo de calentamiento especializado que se utiliza en laboratorios científicos y de productos para generar calor uniforme para diversas aplicaciones, como análisis de composición, reacciones químicas, calentamiento, fusión y quemado de muestras de laboratorio. Estos hornos están diseñados para funcionar a altas temperaturas y se consideran equipos sensibles debido a su uso prolongado y a la precisión requerida en su construcción y diseño.
Tipos y características de los hornos de laboratorio:
Los hornos de laboratorio se clasifican en tres tipos principales en función de su tamaño y capacidad: de sobremesa, de armario y walk-in. Los hornos de sobremesa son los más pequeños y portátiles, adecuados para tareas básicas de laboratorio. Los hornos de armario son más grandes y pueden albergar varias muestras, mientras que los hornos walk-in son los más grandes, capaces de realizar procesos extensos y complejos. La elección del horno depende de las necesidades espaciales de las muestras y de los requisitos específicos del laboratorio.Funcionamiento y aplicaciones:
Los hornos de laboratorio funcionan mediante transferencia de calor radiante, lo que garantiza un calentamiento uniforme de los elementos colocados dentro de la cámara del horno. Este método es eficaz para tareas como la quema de aglutinantes, la sinterización y la fusión. Los hornos son versátiles y pueden utilizarse en diversos sectores, como la ciencia de materiales, el tratamiento de aguas, las ciencias medioambientales, la química, el tratamiento de metales, la electrónica y la biología agrícola. Son esenciales para funciones rutinarias como recocido de muestras, horneado, curado, eliminación de disolventes y esterilización.
Mecanismo de transferencia de calor: