Un horno de atmósfera controlada, también conocido como horno de atmósfera controlada u horno de tratamiento térmico, es un dispositivo especializado diseñado para calentar materiales en condiciones atmosféricas específicas. Este tipo de horno se diferencia de los hornos convencionales en que no se basa en el aire ambiente para el calentamiento, sino que crea un entorno controlado mediante la introducción de diversos gases o mezclas de gases. El objetivo principal del uso de una atmósfera controlada es evitar la oxidación, la descarburación u otras reacciones químicas no deseadas que pueden producirse cuando los materiales se calientan en presencia de oxígeno u otros elementos reactivos que suelen encontrarse en la atmósfera.
Componentes clave y funcionamiento:
El horno está equipado con una cámara o mufla herméticamente cerrada para evitar la infiltración de aire exterior, que es crucial para mantener la atmósfera controlada. Las medidas de seguridad también son integrales, especialmente cuando se manipulan gases que pueden formar mezclas explosivas. El horno funciona con precisión y ofrece funciones de control exacto de la temperatura, homogeneidad térmica constante y control exhaustivo de todos los parámetros del proceso térmico. Esto lo hace ideal para laboratorios e industrias que requieren un control meticuloso de sus procesos térmicos.Principio de funcionamiento:
El horno de atmósfera de temperatura regulable utiliza un hilo de resistencia como elemento calefactor. Cuando recibe energía, el hilo genera calor, que se transfiere a la muestra dentro de la cámara de calentamiento, elevando así su temperatura. El sistema de control de la atmósfera gestiona el tipo y la composición de los gases dentro de la cámara, como el control del contenido de oxígeno, nitrógeno, dióxido de carbono o hidrógeno, para satisfacer las condiciones atmosféricas específicas que requieren los distintos experimentos. Los sensores de temperatura controlan la temperatura de la muestra en tiempo real y envían la señal de temperatura al circuito de control. Este circuito calcula la potencia calorífica necesaria basándose en las señales de control de la temperatura y la atmósfera, ajustando la corriente de salida para controlar la potencia calorífica y, por tanto, la temperatura y la atmósfera dentro del horno.
Métodos de control de la atmósfera:
Los métodos para controlar la atmósfera incluyen el control del flujo, el control de la presión del aire y el control de la espectrometría de masas. El tipo de atmósfera puede variar, incluyendo oxígeno, nitrógeno, hidrógeno, dióxido de carbono y otros.Campos de aplicación: