El principio de la fusión por inducción en vacío (VIM) implica el uso de la inducción electromagnética para fundir metales en condiciones de vacío. Este método es particularmente eficaz para procesar metales reactivos y aleaciones especiales que requieren un entorno controlado para evitar la contaminación y lograr composiciones químicas precisas.
Resumen del principio:
La fusión por inducción en vacío funciona según el principio de inducción de corrientes eléctricas de Foucault en el metal a fundir. Para ello se utiliza una bobina de inducción que transporta una corriente alterna. El campo magnético generado por esta corriente penetra a través de un medio no conductor (como los materiales refractarios) e induce una tensión en el metal, lo que da lugar a la formación de corrientes de Foucault. Estas corrientes generan calor, que funde el metal. Todo el proceso se realiza al vacío para eliminar gases y elementos volátiles, lo que garantiza una gran pureza y un control preciso de la composición química del metal.
-
Explicación detallada:
- Calentamiento por inducción:
-
El mecanismo central del VIM es el calentamiento por inducción, que utiliza un campo magnético para inducir calor en materiales conductores. La bobina de inducción, que es un electroimán, genera un campo magnético que cambia rápidamente cuando pasa por ella una corriente alterna. Este campo penetra en el metal e induce corrientes de Foucault en su interior.
- Corrientes de Foucault y calentamiento:
-
Las corrientes de Foucault inducidas en el metal son bucles de corriente eléctrica que se generan en respuesta al campo magnético cambiante. Estas corrientes fluyen en el metal y encuentran resistencia, lo que hace que el metal se caliente debido al efecto de calentamiento Joule. Este calentamiento es localizado y puede ser muy intenso, provocando la fusión del metal.
- Entorno de vacío:
-
El entorno de vacío en el que se lleva a cabo el VIM tiene múltiples propósitos. En primer lugar, elimina la presencia de gases que podrían reaccionar con el metal o causar oxidación. Esto es crucial para metales reactivos como el titanio y el aluminio. En segundo lugar, el vacío permite un control preciso de la composición química de la masa fundida, ya que impide el escape de elementos volátiles y garantiza que el metal no se contamine.
- Control y precisión:
El VIM proporciona un control excepcional sobre el proceso de fusión. Las condiciones de vacío, junto con la capacidad de controlar de forma independiente la presión, la temperatura y la agitación, permiten el desarrollo de prácticas de fusión adaptadas a composiciones de aleación específicas y a las propiedades deseadas. Este nivel de control es esencial para producir aleaciones especializadas de alta calidad utilizadas en aplicaciones críticas como las industrias aeroespacial y nuclear.Corrección y revisión: