La porcelana se cuece a distintas temperaturas dependiendo de la aplicación específica y del tipo de porcelana que se utilice. En las aplicaciones dentales, la porcelana se cuece normalmente a temperaturas que oscilan entre 982°C y 1120°C (1800°F y 2050°F). En el caso de los esmaltes de sobreglaseado sobre porcelana, la temperatura de cocción suele ser inferior, oscilando entre 750°C y 950°C.
Cocción de porcelana dental:
En el contexto de las restauraciones dentales, la porcelana se cuece a altas temperaturas para garantizar una adhesión y una integridad estructural adecuadas. La transición de la porcelana cocida al aire a 2100 °F a la porcelana cocida al vacío a 1800 °F supuso un avance significativo en la tecnología de los laboratorios dentales. Más recientemente, los implantes dentales y los puentes complejos se fabrican calentando los composites cerámicos en hornos a 1120 °C (2050 °F). Esta alta temperatura es necesaria para mantener una temperatura uniforme dentro de un estrecho margen (± 5 °F o 2,5 °C) para evitar la contracción o distorsión durante el proceso de cocción.Esmaltes Overglaze sobre porcelana:
Para la aplicación de esmaltes sobre esmalte sobre porcelana, se realiza una segunda cocción en hornos de mufla a temperaturas más bajas. Estos hornos suelen alcanzar temperaturas entre 750°C y 950°C, dependiendo de los colores específicos utilizados. Esta temperatura más baja es necesaria para evitar la decoloración de los pigmentos del esmalte, que son sensibles a las altas temperaturas requeridas para el cuerpo y el esmalte de la porcelana.
Sinterización de óxido de circonio:
Es importante tener en cuenta que los hornos de porcelana no son adecuados para la sinterización de circonio, que requiere un proceso diferente que implica ciclos prolongados de cocción a alta temperatura a unos 1.550 °C durante al menos 8 horas, seguidos de un período de enfriamiento de 2 horas. Este proceso es distinto de la cocción de porcelana y requiere un equipo especializado.
Mantenimiento y calibración: