El calentamiento por inducción puede utilizarse para fundir una gran variedad de metales, incluidos metales preciosos (oro, plata, cobre, paladio, platino) y sus aleaciones, así como otros metales no férreos y aleaciones como cobre, aluminio, latón y bronce. El proceso es eficaz y versátil, capaz de manipular cantidades de metal de pequeñas a grandes y se utiliza en diversas aplicaciones industriales, incluida la producción de metales semiacabados, lingotes y metales refinados.
Metales preciosos y sus aleaciones:
El calentamiento por inducción es especialmente eficaz para fundir metales preciosos como oro, plata, cobre, paladio y platino. Estos metales se utilizan a menudo en aplicaciones de gran valor como la joyería y la electrónica. El proceso de inducción permite un control preciso de la temperatura de fusión, garantizando la pureza y calidad del metal fundido.Metales no férreos y aleaciones:
Además de los metales preciosos, el calentamiento por inducción también se utiliza para fundir otros metales no férreos como cobre, aluminio, latón y bronce. Estos metales se utilizan ampliamente en diversas industrias debido a su conductividad, resistencia a la corrosión y otras propiedades. La fusión por inducción es eficaz para estos metales ya que permite un calentamiento rápido y uniforme, lo que es crucial para mantener la integridad del metal durante el proceso de fusión.
Versatilidad y eficacia:
Los hornos de fusión por inducción pueden ajustarse para manejar diferentes tamaños de cargas, desde pequeñas cantidades hasta cientos de toneladas de metal fundido. Esta flexibilidad se consigue cambiando la geometría de la bobina de inducción y ajustando la frecuencia y la potencia. El Grupo Inductotherm, por ejemplo, diseña equipos de inducción a medida para aplicaciones específicas con el fin de garantizar la máxima eficacia.Aplicaciones más allá de la fusión:
El calentamiento por inducción no sólo se utiliza para fundir metales, sino también para otros procesos como la colada continua, la colada en ménsula para lingotes, el refinado de metales y la colada a la cera perdida para fabricar objetos. Además, se utiliza en procesos como el ajuste por contracción y la soldadura fuerte, en los que se requiere un calentamiento preciso para unir piezas metálicas.